domingo, 17 de octubre de 2010

salva opina


¿Qué nos pasa?

Seguimos teniendo los mismos problemas y dificultades que antes de la huelga general, el gobierno no está por corregir prepotencias e imposiciones arbitraria a favor del gran capital, seguimos creciendo en el desempleo, a nuestras costas siguen llegando gentes desesperadas en busca de una oportunidad, nuestros jóvenes no puede emanciparse pese a estar más preparados cultural y científicamente que nunca...
En Grecia, en Portugal antes, en Francia ahora, no cesan las movilizaciones sociales frente a políticas del mismo rango e intencionalidad que las que se están aplicando aquí. Un amigo planteaba en la red social FB por qué allí siendo tan de derechas los gobiernos como el nuestro la ciudadanía, la clase trabajadora, los estudiantes, se están moviendo sin parar y aquí las respuestas parecen más limitadas.
¿Qué nos pasa? Se me ocurren varias respuestas, probablemente cada ciudadano tendrá la suya, pero ahí van las mías con el ánimo de abrir un debate que pueda contribuir a mover la rueda semiestancada de la lucha por la justa repartición de cargas y beneficios, en definitiva por lo que nuestros abuelos llamaban con orgullo emancipación social.
Este gobierno de derechas consiguió revestirse de un traje de izquierdas y engañar a la ciudadania, bastante desmoralizada y desorganizada en ese momento (en el último mandato de Aznar) pese a las grandes movilizaciones que protagonizó frente a la guerra de Iraq, porque la izquierda perdió mucho tiempo en discusiones internas y personalismos desbocados, porque se fue sustituyendo la militancia por las comparecencias aparatosas ante la prensa con un discurso ininteligible y alejado de la realidad, porque faltó programa (como decía Anguita) y sobre todo gente dispuesta a llevarlo a cabo y a renunciar al chalet y al coche de más cilindrada... lo cómodo fue esperar a ver que hacían los socialdemócratas, que se presentaban como los salvadores del "estado del bienestar social". 1º Grave error el nuestro: confundimos dicha entelequia (estado de bienestar) con un fin (socialismo) cuando sólo era un medio de afianzar las reivindicaciones inmediatas, confundimos táctica con estrategia.
2º grave error, olvidamos que "si nadie trabaja por ti, nadie debe decidir por ti", el cambio social no puede ser dejado en manos de profesionales de la política venidos a mercenarios del capital.
3º La "burocracia" política y sindical, de nuestras organizaciones, es incompatible con la lucha ciudadana y de los trabajadores, o lo que es lo mismo sin militancia, sin movimiento de lucha de masas, nada se mueve, nada cambia a mejor...
4º El bipartidismo político infuye a favor de nuestros adversarios, sin duda, pero no es la causa principal de su triunfo sobre nosotros.
¿Qué nos pasa? ¿Nos conformamos? Pues, entonces los que asoman en el horizonte, la extrema derecha, darán una nueva vuelta de tornillo, apretarán más si cabe, pero, ¡qué triste!, siempre nos quedará el lamento... ¿Es lo que queremos?

3 comentarios:

  1. Pues sí, Salva, qué triste...

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  2. Demasiado tranquilos, para todo lo que se nos viene encima...

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  3. Luchas en Francia
    y aquí no pasa de "na"
    por eso este gobierno
    erre que erre
    nos la mete doblá.

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